miércoles, 22 de febrero de 2012

SONGS SUNG WITH HEART


Two articles in a row written in foreign languages are too much. But yesterday, a friend of mine sent me a link with a video from the United Kingdom. It’s only a song, perhaps it’s not the best one, but its singularity is that military wives sing it. Gareth Malone, a TV chorister, formed the choir. He managed to bring together one hundred women while their husbands, based in Chivenor and Plymouth, were serving in Afghanistan. They’re abroad fighting  to protect, as their wives’ T-shirt shows, Queen & Country. Striking!

The name of the song is Wherever you are, music composed by Paul Mealor[1] and lyrics composed of words and poems from letters between themselves and their deployed partners. It became the UK's Official Christmas number one[2] of 2011, having sold an astonishing, at least for me, 556,000 copies in the week leading up the Christmas, more than the rest of the Top twelve combined. Its title was inspired by words engraved on a bracelet that a Royal Marine gave his wife before leaving for Afghanistan. Nothing has been heard about it in Spain (only some isolated bloggers…).

Samantha Stevenson
PHOTO: www.dailymail.co.uk
But, the more I read, the more surprised I am. Profits are going to the Royal British Legion (RBL)[3] and the Soldiers, Sailors, Airmen and Families Association (SSAFA)[4]. Even the Government has been involved waiving VAT on each purchase of the song.  Only there’s something I didn’t understand at all: The campaign launched by Internet ‘trolls[5]’ who have called Samantha Stevenson, the soloist star of the choir, ‘vile and disgusting’ due to her tattoos[6]. I can only tell you, dear Mrs. Stevenson, don’t let it get to you. There’re lots of cowards on the Net. Look after your children, wait for your husband to return (I hope he is already at home) and, please, keep on singing!

Yes, it’s true; this song touched me deeply. Sometimes, I envy Americans, Canadians, Australians, British, French…their sensitivity to their soldiers. Now, when I’m about to deploy for a six-month tour of duty in Afghanistan, those voices have shaken my heart. Of course, I’ve bought their CD[7]…But don’t get confused…¡Gibraltar Español!




[1] He was described by the New York Times as one of the most important composers to have emerged in Welsh choral music. He was the composer of Prince William and Kate Middleton’s royal wedding (motet Ubi caritas was performed at Westminster Abbey).
[2] The song ‘Wherever you are’ beat its closest rival –the single by X Factor winners Little Mix – by five to one. I honestly doubt this kind of things could happen in Spain. 
[3] The Royal British Legion provides welfare to the whole Armed Forces family - serving, ex-Service and their dependants. They also campaign on issues affecting Service people, are the custodian of Remembrance, run the Poppy Appeal and are one of the UK's largest membership organizations. www.britishlegion.org.uk
[4] They are the UK's oldest Armed Forces charity. They provide practical help and assistance to anyone who is currently serving or has ever served, even if it was only for a single day. Each year, they support more than 50,000 people in the Armed Forces community. AS stated in its homepage: Because we believe that their bravery, dedication and commitment deserve a lifetime of support. www.ssafa.org.uk
[5] Troll: A person who submits deliberately inflammatory articles to an internet discussion.
[6] Source: www.dailymail.co.uk.
[7] In my dreams is the name of their Album. Actually, I did a pre-order through Amazon.uk because it will be released on 5th of March 2012.

lunes, 13 de febrero de 2012

ILS FONT L'ESPAGNE BRILLER


ALBERTO CONTADOR
FOTO: www.zimbio.com
Je vous connais bien. J'ai de bonnes expériences partagées avec vous: Un mois à l'École Spéciale Militaire de Saint-Cyr avec la promotion Lieutenant Tom Morel; des manœuvres à Sisonne et  à Belle-Île-en-Mer; des patrouilles sur les routes de Bosnie-Herzégovine, encadrés dans la division Salamandre; quelques visites et exercices de cadres à l'Ecole Militaire à Paris et beaucoup des réunions au Quartier Général de L’Eurocorps à Strasbourg. Même, j’ai reçu la Médaille de la Défense Nationale (Échelon Or).

PAU GASOL
FOTO: www.interbascket.net
Par conséquent, je ne vais pas commettre l’erreur d’identifier la France avec le troupeau des cochons qui traînent nos figures du sport dans la boue au CANAL +. J’ai d’amis français et des collègues militaires qui connaissent et respectent bien L’Espagne. Et moi-même, je respect et, pourquoi pas, j'aime bien la France (bien que quelque fois, quand je lis l'Histoire, je me mettre en colère...).



   
RAFA NADAL
FOTO: www.canisportblog.com
Mais, fait la clarification, vôtres compatriotes du CANAL + ont dépassés les bornes une fois de plus. Donc, en plus de les envoyer se faire foutre, je veux rendre mon petit hommage à Contador, Nadal, Gasol, Casillas, etcetera. Tous les espagnols qui ont fait réalité le slogan, conçu par NIKE aussi, être espagnol n’est plus une excuse, c’est une responsabilité.


  Écoutez et apprenez!







domingo, 5 de febrero de 2012

EL VALOR DE LAS PALABRAS


ROCROI, EL ÚLTIMO TERCIO. DE AUGUSTO FERRER-DALMAU
FOTO: www.ferrerdalmaunoticias.blogspot.com

No sé lo que pasaba por la mente de Luis de Oteyza[1] cuando escribió su poema “La vuelta de los vencidos” pero siempre he terminado su lectura con cierto desasosiego. Como soldado, disfruto de la Historia militar, especialmente la española. La narración de nuestras victorias e, incluso, de nuestras derrotas, siempre que aparezcan en ellas destellos de heroísmo, me hacen sentir un profundo orgullo de ser lo que soy. Me da igual si se trata de un cabo y cuatro “gorilas” en un “blocao” en mitad del Rif o de todo un ejército en los campos de Rocroi. En ambas situaciones, simple victoria o derrota heroica, e independientemente del número o tamaño de la unidad, veo implícitas gran parte de las virtudes militares, colectivas e individuales.

PRISIONEROS ALEMANES DURANTE LA 2ª GM
Sin embargo, la derrota gris; la retirada, que no el repliegue, no confundamos los términos[2]; la rendición o la capitulación, son situaciones que, desde mi punto de vista y espero no experimentarlo nunca, deben marcar de por vida a un militar. Máxime cuando tu posición te convierte en un simple “soldado de línea”, peón sacrificable en pos de una decisión estratégica, política o, simplemente, de un cúmulo de desgraciadas circunstancias.

El poema en cuestión dice así:

"Por la estepa solitaria, cual fantasmas vagarosos,
abatidos, vacilantes, cabizbajos, andrajosos,
se encaminan lentamente los vencidos a su hogar,
y al mirar la antigua torre de la ermita de su aldea,
a la luz opalescente que en los cielos alborea,
van el paso retardando, temerosos de llegar.

Son los hijos de los héroes que, en los brazos de la gloria,
tremolando entre sus filas el pendón de la victoria,
regresaron otras veces coronados de laurel.

Son los hijos, la esperanza de esa raza poderosa
que, los campos fecundando con su sangre valerosa,
arrastraba siempre el triunfo amarrado a su corcel.

Son los mismos que partieron entre vivas y clamores,
son los mismos que exclamaron: ¡Volveremos vencedores!…
Son los mismos que juraban al contrario derrotar,
son los mismos, son los mismos, sus caballos sudorosos
son los potros impacientes que piafaban ardorosos
de los parches y clarines al estruendo militar.

Han sufrido estos soldados los horrores de la guerra,
el alud en la llanura y las nieves en la sierra,
el ardor del rojo día, de las noches la traición;
del combate sanguinario el disparo, la lanzada
—el acero congelado y la bala caldeada—
y el empuje del caballo y el aliento del cañón.

Pero más que esos dolores sienten hoy su triste suerte,
y recuerdan envidiosos el destino del que muerte
encontró en lejanas tierras.

Es mejor, mejor morir,
que volver a los hogares con las frentes abatidas,
sin espadas, sin banderas y ocultando las heridas,
las heridas que en la espalda recibieron al huir.

A lo lejos el poblado ya percibe su mirada:
¿Qué dirá la pobre madre? ¿Qué dirá la enamorada
que soñaba entre sus brazos estrecharle vencedor?
¿Qué dirá el anciano padre, el glorioso veterano,
vencedor en cien combates? ¿Y el amigo? ¿Y el hermano?
¡Callarán avergonzados, si no mueren de dolor!…

Y después, cuando a la lumbre se refiera aquella historia
del soldado, que al contrario disputando la victoria,
en los campos de batalla noble muerte recibió;
y los viejos sus hazañas cuenten luego, entusiasmados,
se dirán los pobres hijos del vencido, avergonzados:
¡Los valientes sucumbieron y mi padre regresó!…

Tales cosas van pensando los vencidos pesarosos,
que, abatidos, vacilantes, cabizbajos y andrajosos,
caminando lentamente, se dirigen a su hogar;
y al mirar la antigua torre de la ermita de su aldea,
a la luz opalescente que en los cielos albores
van el paso retardando, temerosos de llegar."

MILITARES ESPAÑOLES EN CUBA. 1898
FOTO: www.kalipedia.com
El poema refleja, para mí, todo aquello que no querría sentir jamás. Todos los miedos, terrores más bien, que pueden adornar mis peores pesadillas de soldado. Pero no sólo me incomoda la lectura del fracaso profesional que refleja en los vencidos, sino también el ver cómo sus circunstancias, buscadas o impuestas, les conducen a un fracaso mucho peor, el social, familiar y personal. Son, sin duda alguna, coletazos de actitudes vividas en otros tiempos y ya espero que desaparecidas, pero que siguen indelebles en la memoria colectiva de nuestras Fuerzas Armadas. Sería fácil recurrir al ejemplo norteamericano de Vietnam pero, si tuviera que ponerme a escribir sobre ello, hablaría del trato que nuestra sociedad dio a los veteranos del llamado Desastre del 98.

FOTO: www.faabis.com
Por ello, por el maltrato moral que conlleva, me subleva cuando alguien quiere colocar a nuestros militares, colocarnos, injusta y gratuitamente en esa posición de derrota. Intentar que sintamos la sensación del vencido aún sin serlo. Gente que se considera por encima del bien y del mal, que desconocen el mundo de la milicia y lo que significa la disciplina en su acepción más amplia. Gente que emplea la terminología alegremente, sin tener en cuenta que no somos mas que ese “soldado de línea” del que hablé antes.

LEGIONARIOS EN IRAK. 2004
FOTO: www.elpuercoespin.com.ar
La última vez que me acordé de “la vuelta de los vencidos” fue cuando, en abril de 2004, los titulares de todos los medios de comunicación no hablaban de otra cosa que no fuera “la retirada de las tropas españolas de Irak”. Esa omnipresente palabra, retirada, que, sin embargo, en ningún momento fue utilizada por el presidente del Gobierno en su comunicado oficial[3], me hacía hervir la sangre. Los que allí estuvieron, les gustara o no la decisión adoptada por el gobierno entrante, cumplieron su cometido y se replegaron, aunque yo simplemente diría que  “volvieron a casa”, sin una mácula de deshonor. Muy al contrario, su trabajo fue excepcional porque, como he dicho muchas veces, “somos buenos en lo nuestro” y especialmente cuando nos dejan hacer. No me gustaron las declaraciones de determinados altos cargos militares que, en mi opinión, rompieron la neutralidad de las FAS, bien situadas al margen de la “reyerta” política que se montó tras hacerse pública la orden de regreso. Tuvieron su premio de “estómagos agradecidos”; allá ellos con su conciencia. 

SOLDADO ESPAÑOL EN AFGANISTÁN
FOTO: www.diarioya.es
Ahora, la misma canción se repite sobre Afganistán. El mismo cuidado desde el Ministerio de Defensa en no pronunciar la palabra “retirada” o, incluso, “repliegue”, pero el mismo aluvión de titulares en los medios. Por eso quiero desde aquí, dos años antes de que pueda producirse el anunciado cierre total del escenario afgano, con la misma antelación con la que la clase política ha decidido hacer su anuncio, dejar claro (o, quizás, dejarme claro) que no hay “vuelta de los vencidos” que valga. Volveremos a casa, otra vez, con la cabeza bien alta y la íntima satisfacción del deber cumplido.


[1] Luis de Oteyza nació en Zafra (Badajoz), en 1883, y murió en Caracas, exiliado tras la Guerra Civil, en 1961. Fue periodista, escritor y poeta. Ideológicamente se le puede definir como republicano de izquierdas y anticlerical.
[2] Según la Doctrina de Empleo de las Fuerzas Terrestres (Edición 3ª) de 2003, la retirada es la operación retrógrada que se emprende cuando una fuerza propia rompe intencionadamente el contacto con el enemigo y marcha hacia retaguardia, alejándose de él. El repliegue, en cambio, es un movimiento hacia retaguardia llevado a cabo por fuerzas que no están en contacto con el enemigo. Intentaré explicar lo que quiere decir este críptico y a veces enrevesado lenguaje militar. La diferencia entre ambas acciones está en el contacto, o no, con el enemigo. Es decir, la retirada nos la impone el enemigo, bien porque nos impide alcanzar nuestro objetivo, bien porque no nos permite mantenerlo si lo hemos alcanzado o bien porque nos coloca en una situación insostenible desde el punto de vista operativo o logístico. Con el repliegue buscamos voluntariamente situar nuestras fuerzas en una mejor posición para operaciones futuras o adaptar el despliegue a una nueva situación.
[3] En el texto, leído por el entonces presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero el 19 de abril de 2004, se utilizaban principalmente las expresiones “vuelta a casa” y “regreso de las tropas”.  Después de esta primera declaración, sí se utilizó por parte de nuestros políticos la palabra retirada en varias ocasiones. Una irresponsabilidad, pero que ya no sorprende a nadie, viniendo de la “casta” de donde viene.